El coronavirus se está extendiendo por muchas naciones. En nuestro mundo globalizado actual, curiosamente, estamos volviendo a nuestras casas para reducir la velocidad del contagio y escapar de los riesgos del exterior. Por lo tanto, necesitamos mantener nuestras casas protegidas del virus, para que podamos estar seguros y saludables. Prevenir la infección por COVID-19 es posible.

Sin embargo debemos tener en cuenta que es muy posible contraer el virus. Lo importante en esta primera etapa de la pandemia es evitar el exceso de pacientes que haría que los recursos médicos disponibles fueran insuficientes. Al quedarnos en casa y mantenerla limpia, nuestras posibilidades de pasar la pandemia sin infección aumentan considerablemente. Entonces hagamos lo siguiente:

Si tiene que salir, una vez que regrese quítese los zapatos y desinféctelos con alcohol o hipoclorito en un espacio cerca de la puerta de la casa. En el mismo lugar, coloque una caja o una bolsa para la ropa que llevaba puesta y luego póngase otro par de zapatos o sandalias, que deben estar listas allí mismo. Lleve esa ropa utilizada a la lavadora y dúchese con abundante jabón, evitando tocarse los ojos, la boca y la nariz. Luego vístase con ropa limpia. Caminar en su casa con los mismos zapatos que usaba en la calle es un gran riesgo, ya que el coronavirus se adhiere fácilmente a las suelas y, en cuanto a su ropa, las personas que tosen en la calle pueden contaminarla. El virus puede permanecer en el piso y en distintas superficies por varios días.

Según los CDC, el coronavirus está activo durante horas o días, dependiendo de los materiales de donde se encuentre. El uso de agua y jabón es la mejor arma contra él, porque el jabón destruye la capa externa que cubre el virus (un virus no es un ser vivo, es una molécula que afecta las células) y lo desactiva. Otros productos efectivos contra virus son alcohol, cloro, hipoclorito, blanqueador, toallitas desinfectantes y detergentes.

Si una persona está enferma en su hogar, asegúrese de que las superficies y dispositivos que usualmente tocamos con nuestras manos estén desinfectados: los interruptores, pomos de las puertas, manijas, etc., deben limpiarse y desinfectarse varias veces al día.

Para la ropa y los platos, la NSF (anteriormente conocida como National Sanitary Foundation) ha certificado varios electrodomésticos apropiados para combatir virus y gérmenes, como lavadoras y lavavajillas, entre otros. Sin embargo, debe hacer un lavado completo con agua y su detergente o lavavajillas habituales suele bastar.

Hay investigaciones sobre los beneficios de una mayor humedad en los lugares, ya que crea un ambiente que los virus no pueden soportar bien. Los humidificadores pueden funcionar, pero también pueden reproducir bacterias, por lo que deben limpiarse con mucha frecuencia.

En caso de sentirse enfermo, use la máscara tapabocas. Es necesaria para los trabajadores de la salud, las personas que cuidan a los enfermos y los enfermos mismos.

Lávese las manos constantemente. Si no tiene un baño cerca, lleve un desinfectante para manos en su bolsillo.

Tenga a mano los números de teléfono de los servicios de salud. En caso de que sienta dificultad para respirar, dolores de cabeza, falta de olfato y / o fiebre, llame y solicite hacerse una prueba de coronavirus.

Es realmente importante ser meticuloso cuando se está cuidando de algo tan peligroso (y para muchos de nosotros nunca antes conocido), como una pandemia. Nuestros hogares son nuestros santuarios, y deben estar debidamente protegidos para ser realmente nuestros refugios.